Tesoros

Nuestra vida está compuesta por piezas, por pequeños elementos sin los cuales, no podríamos ser felices. Cuando una de esas piezas tiene un problema, algo en ti falla. Algo te dice que las cosas no van bien o que pueden ir a peor incluso. Esto te supone parar. Parar con todo lo que estás haciendo e intentar arreglar esa pieza. Pero, ¿qué te encuentras? Que ésta ya está desgastada, abatida y sin fuerzas. Porque no ha fallado una vez, ni dos, ni tres. Han sido demasiadas. Aquí es cuando te das cuenta de que es única, y que hay que tratarla como un tesoro, porque es insustituible, y sin ella nada podría funcionar, nada sería igual.
Pero es que ese cuidado no sólo depende de ti. Y aunque hagas todo lo que esté en tu mano, si las otras partes de las que también depende no colaboran, esto sería intentar un imposible.
Yo debo de ser capaz de controlarme a mi misma y a esas cosas que dependen de mi. Pero con las otras partes yo no puedo hacer nada. Si no son capaces ni de controlarse a sí mismos, yo no puedo pretender que lo hagan con aquellas cosas que dependen de ellos. 
"No te das cuenta de lo que tienes hasta que lo pierdes". Aquí no hay pérdidas, pero lo que hay que hacer es cuidar todos esos pequeños elementos para que ninguno falle y después no tener que lamentarse por errores pasados. Porque no podemos volver el tiempo atrás, pero sí trazar el futuro que queremos vivir.

A veces un clavo no saca otro clavo...

Confusa, indecisa, sola...
Intentas recuperar esa historia idílica llena de imposibles, esa realidad perdida. Pretendes hacer realidad ese cuento de hadas con final feliz, pero te has equivocado de personajes. A veces un clavo no saca otro clavo. Esta historia que estás viviendo es la realidad, en la que se muestran los problemas, los obstáculos, en la que no todo vale y el final no existe.
Tus propios pensamientos te traicionan. No expresas lo que sientes. Piensas blanco y dices negro. Crees que lo estás haciendo bien, y que el olvido surge de la noche a la mañana. Pero esto no siempre es así.
Has fingido que nada te importaba, has intentado aparentar estar bien, ser feliz, pero sólo te has engañado a ti misma. Te basas en imposibles que no dejan de brindarte oportunidades que sabes que no conseguirás, pero aún así, sucumbes a las provocaciones.
Vives en un mundo de confusión, de mentiras que chocan entre sí y que te hacen tomar el camino equivocado, el de la mentira ideal, el que da la impresión de haber arreglado las cosas, pero en el fondo sólo es una forma de ocultar la verdad, esa verdad que sólo sabes tú. Esa verdad que se sigue remontando a un pasado irrecuperable.


"Sometimes I wake up by the door,
and heard you calling, must be waiting for you,
even that when we're already over,
I can't help myself from looking for you"

Let the rain wash away all tha pain of yesterday...

 ¿Y dicen que yo soy difícil de entender?

Últimamente la gente me descoloca. No saben lo que quieren, no saben lo que dicen, pero aún así actúan.¿Actuar para qué? Lo único que hacen es empeorar las cosas, pero les da igual. Son unos egoístas, sólo piensan en lo mejor para ellos, aunque para eso tengan que hacer daño a los demás.
Y aún sabiendo lo que te han hecho sufrir, al día siguiente cambian te opinión y te vuelven a desconcertar, creándote ilusiones que ya habías dado por perdidas, procurando reconstruir sueños rotos, intentando recuperar la confianza que un día depositaste en ellos. Sólo buscan recuperar lo perdido, saben que eres débil y que sucumbirás a lo que te digan. No sabes lo que tienes hasta que lo pierdes ¿no?
Pero lo que ellos no saben es que la confianza es como un cristal, una vez roto, nunca volverá a ser igual.
¿Sabéis cuál es el contrario de amor? La mayoría me diríais que es el odio, pero no. Para mi el contrario de amor es la indiferencia. Hoy te quiero, y mañana ya no existes. ¿Qué gente más falsa, no?
Sólo me queda decirte que no te fíes de nadie, porque visto lo visto, hasta tus propios pensamientos puede traicionarte.
Olvida el pasado y vive el presente sin pensar en el futuro.